Tras la esfera que gira más lejana
pasa el suspiro de mi corazón:
inteligencia nueva, que el Amor
llorando pone en él, lo lleva arriba.
Cuando ha llegado allá donde desea,
ve a una mujer, honores recibiendo,
y luce de tal forma, que el espíritu
peregrino la mira en su esplendor.
Y la ve tal que, cuando me lo cuenta,
no lo comprendo, tan sutil le habla
al triste corazón que le hace hablar.
Sé yo que habla de aquella tan noble,
porque a Beatriz recuerda muchas veces,
y así lo entiendo bien, caras señoras.
Dante Alighieri
No hay comentarios:
Publicar un comentario