¡Oh pinos, oh hermanos en tierra y ambiente
yo os amo! Sois dulces, sois buenos, sois graves
Diríase un árbol que piensa y que siente,
mimado de auroras, poetas y aves.
yo os amo! Sois dulces, sois buenos, sois graves
Diríase un árbol que piensa y que siente,
mimado de auroras, poetas y aves.
Tocó vuestras frente la alada sandalia;
habéis sido mástil, proscenio, curul,
¡oh pinos solares, oh pinos de Italia,
bañados de gracia, de gloria, de azul.
habéis sido mástil, proscenio, curul,
¡oh pinos solares, oh pinos de Italia,
bañados de gracia, de gloria, de azul.
Sombríos sin oro de sol, taciturnos,
en medio de brumas glaciales y en
montañas de ensueño, ¡oh pinos nocturnos,
oh pinos del Norte, sois bellos también!
en medio de brumas glaciales y en
montañas de ensueño, ¡oh pinos nocturnos,
oh pinos del Norte, sois bellos también!
Con gestos de estatuas, de mimos, de actores,
tendiendo a la dulce caricia del mar,
¡oh pinos de Nápoles, rodeados de flores,
oh pinos divinos, no os puedo olvidar!
tendiendo a la dulce caricia del mar,
¡oh pinos de Nápoles, rodeados de flores,
oh pinos divinos, no os puedo olvidar!
Cuando en mis errantes pasos peregrinos
la Isla Dorada me ha dado un rincón
do soñar mis sueños, encontré pinos,
los pinos amados de mi corazón.
la Isla Dorada me ha dado un rincón
do soñar mis sueños, encontré pinos,
los pinos amados de mi corazón.
Amado por tristes, por blandos, por bellos;
por su aroma, aroma de una inmensa flor;
por su aire de monjes, sus largos cabellos,
sus savias, ruidos y nidos de amor.
por su aroma, aroma de una inmensa flor;
por su aire de monjes, sus largos cabellos,
sus savias, ruidos y nidos de amor.
¡Oh pinos antiguos que agitara el viento
de las epopeyas, amados del sol!
¡Oh líricos pinos del Renacimiento
y de los jardines del suelo español!
de las epopeyas, amados del sol!
¡Oh líricos pinos del Renacimiento
y de los jardines del suelo español!
Los brazos eolios se mueven al paso
del aire violento que forma al pasar
ruidos de pluma, ruidos de raso
ruidos de agua y espuma de mar.
del aire violento que forma al pasar
ruidos de pluma, ruidos de raso
ruidos de agua y espuma de mar.
¡Oh noche en que trajo tu mano, Destino,
aquella amargura que aún hoy es dolor!
La luna argentaba lo negro de un pino,
y fui consolado por un ruiseñor.
aquella amargura que aún hoy es dolor!
La luna argentaba lo negro de un pino,
y fui consolado por un ruiseñor.
Románticos somos… ¿Quién que es, no es romántico?
Aquél que no sienta ni amor ni dolor,
aquél que no sepa de beso y de cántico,
que se ahorque de un pino: será lo mejor…
aquél que no sepa de beso y de cántico,
que se ahorque de un pino: será lo mejor…
Yo, no. Yo persisto. Pretéritas normas
confirman un anhelo, mi ser, mi existir.
¡Yo soy el amante de ensueños y formas
que vienen de lejos y va al porvenir!
confirman un anhelo, mi ser, mi existir.
¡Yo soy el amante de ensueños y formas
que vienen de lejos y va al porvenir!
Rubén Darío
No hay comentarios:
Publicar un comentario